Cuando llegamos no había nadie en casa de los chicos.
-Vaya… se ve que estamos solos-Dije tímidamente.
-Esta casa siempre está vacía… no paramos de salir de un
sitio para otro.
-Qué bien…
-Ahora vengo… voy a buscar el botiquín, siéntete como si
estuvieras en tu casa.
Niall subió las escaleras y lo perdí de vista.
En una mesita se encontraba una foto de Niall con su madre…
me conmovió mucho aquella fotografía.
Niall volvió con el botiquín.
-¿Es duro, verdad?
-¿El qué?-Preguntó extrañado Niall.
-Estar tan lejos de la familia… de tu hogar…
-Pues sí, pero que te voy a contar a ti… tú estás en la
misma situación que yo.
-Bueno… más o menos.
-Déjame ver tu muñeca, anda.
Niall la estuvo revisando y puso una grave mueca en su
rostro.
-¿Qué? –Le dije asustada.
-Cada vez se te está hinchando más… deberíamos haber ido al
médico-Dijo éste cogiendo una venda.
-¡Ay! Con cuidado-Repuse yo cuando comenzó a vendármela.
-Qué quejica…
-Niall…gracias.
-No tienes por qué dármelas.
-Sí… casi te metes en pelea por mi culpa.
-¿Lo dices por Dylan? Lo nuestro viene desde hace años.
Nunca nos llevamos bien.
-¿Me prometes que no se peleareis? No quiero que te hagan daño.
-Tu poca confianza es mí… me está empezando a resultar algo
indignante.
Comencé a reír ante la respuesta de Niall.
-¿Por qué nos llevamos tan mal? Digo, es la primera vez que
estamos hablando sin gritarnos y tampoco se nos da tan mal.
-Quizás nacimos para no ser amigos…Buena esta mano ya está lista-Dijo
Niall soltando mi mano con cuidado.
-Vaya… ¿y hasta cuando tengo que tener este trasto puesto?
-No lo sé… supongo que hasta que te deje de doler…
-Pues mira que bien… empezaré mis 17 con una mano rota… todo
muy ok.
Niall soltó una gran carcajada ante mi comentario.
-¿Cuándo es tu cumpleaños?-Me preguntó éste.
-El sábado que viene…
-Pues si… creo que tendrás que celebrarlo con la mano rota.
-¿Celebrarlo? Yo nunca celebro mis cumpleaños… es una
costumbre que tengo desde bien pequeña.
-¿Qué? Eres la primera persona que conozco que no celebra su
cumpleaños…
-No me gusta cumplir años… ¿A quién le gusta envejecer?
-Creo que a los 17 es un poco pronto para preocuparte por cosas
como ésa. Oh dios…
-¿Qué te pasa? ¿Qué tengo?
-¿Es eso una cana?-Dijo apuntándome con el dedo Niall.
-¡¿Qué?! ¿Dónde?-Dije mientras me levantaba y me ponía
enfrente de un espejo.
Vi como Niall se reía sin parar…
-Era una broma…
-Era una broma…-Repetí en tono de burla mientras le lanzaba
un cojín con la mano buena.
Se escucharon voces detrás de la puerta. Los chicos habían
llegado.
-¡Buenas! Oh, vaya Miriam…-Dijo Liam al entrar.
Al escuchar mi nombre Harry se asomó por detrás de éste.
-¿Miriam? ¿Qué haces aquí?.
-Harry… tuve un contratiempo.
-Sí… a tu amiguita le ha dado por ajuntarse con la basura de
Londres… y se ha lastimado la muñeca.
-¡EH! Dylan no es ninguna basura, de hecho fue por tu culpa
que me cayera.
-¿Ahora es por mi culpa? ¿Quién te entiende?-Gritó Niall
mientras se volvía hacia mí, encarándome.
-¡Claro que sí! Verte allí me desconcertó…
-Bueno, ahora no voy a poder ni salir de casa…
-¡Parad! Chicos me estáis estresando-Gritó esta vez Zayn.
-Miriam… Dylan no es de fiar-Dijo Harry.
-Por ahora no me ha hecho nada… así que dejadme
-Miriam, casi te rompes la muñeca…-Inquirió Harry.
-Si es que no la tiene rota… porque la muy bruta no me ha
dejado que la llevase al médico.
-Mirad, es tarde y me tengo que ir. Otro día seguís diciendo
lo que tengo y lo que no tengo que hacer-Dije mientras me marchaba de la casa.
-¡Miriam! ¡Espera!-Gritó Harry a mi espalda.
Pero yo no me detuve, pude oír que Niall decía:
-Déjala, que haga lo que ella quiera, ya se dará cuenta de
muchas cosas…
Llegué a casa y para mi sorpresa encontré a mis padres con
Mike y Anne.
-¡Hola! –Grité efusiva al verles.
-¡Cariño!-Anne me abrazó fuertemente.
-Con cuidado…-Dije mientras le enseñaba la mano vendada.
-¿Qué te ha pasado?
Al preguntarme Anne… mis padres y Mike se acercaron
rápidamente.
-Me caí…
-¿Cómo? ¿Y quién te ha vendado? Ven que mire bien esa muñeca…
-Mamá… tranquila. Ya sabes que soy una patosa, suerte que vi
a Niall… él me la vendó.
-¿Qué? ¿No te llevó al médico?-Preguntó mi madre alterada.
-Voy a tener que hablar con ese muchachito-Añadió Anne con
Mike.
-¡Yo fui la que no quise ir! Joder, dejad de preocuparse por
mí, soy lo suficiente grandecita para saber lo que hago.
Dicho esto me subí a mi habitación dando un gran portazo.
Que pesados eran todos…
(Narra Niall)
-Oye chicos… el sábado que viene es el cumpleaños de Miriam…
-¡¿Qué?!-Gritaron todas las chicas y se sentaron junto a mí.
-Espero que haga una gran fiesta-Dijo Louis sonriendo.
-Sí… tengo que hablar con ella para ser el DJ.
-No quiere celebrarlo…-Dije al ver los planes que estaban
organizando los chicos.
-¡Claro que la hará! Yo la convenceré…-Intervino Harry
alegremente.
-¡Que no quiere! –Grité yo ante su gran convencimiento.
-Bueno, tranquilízate…-Dijo éste.
-Perdón… bueno a lo que iba,había pensado en hacerle una
fiesta sorpresa.
-¡FIESTA SORPRESA!-Gritó Danielle.
-Pero… ¿No se llevabais mal?-Inquirió Eleanor.
-Ni bien ni mal, además si no queréis por mí genial… era por
ella.
-¡Qué si lo vamos a hacer pesado!-Gritó Perrie.
-¡Pues a organizarlo todo!
(Narra Miriam)
¿Por qué decía Niall que me iba a dar cuenta de muchas
cosas?
Yo era suficientemente grandecita para saber lo que hacía…Además
a él era al que menos le debería importar lo que me pasase ¿no?
Hoy la verdad… es que se había portado muy bien conmigo.
Ojalá y hubiera durado ese momento para siempre.
Mientras rozaba mi mano… ¿por qué sentí tantas cosas? ¿Por
qué quería besarle? Dios… tenía que dejar de pensar en él. Tenía que olvidarme
de Niall… ¿pero cómo?
oal me encanta tu novela es tan eicnuhefbgcuhnk me doprias dar tu tuenti
ResponderEliminarmi personal es: Miriam Miranda Roldán. Y el dedicado a los chicos es: MariMiriam Narryfans Directioners
ResponderEliminarME ENAMORÉ *.*
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