Me levanté a eso de las siete de la mañana, todavía era de
noche… Salí al balcón a espabilarme un poco.
-Buenos días, mundo-Dije al espirar el aire… El sol saldría
muy pronto.
Cogí de mi armario unos vaqueros largos, una sudadera y un
pañuelo a juego. Cuando vivía en España, Rocío y yo siempre llevábamos unas
gafas sin cristal como amuleto de buena suerte… y hoy me apetecía llevarlas
puestas, así que me las puse. Una de las cosas que más me gustaban de Londres
era esa, la gente se podía vestir como quisiera sin ningún tipo de pudor.
Me recogí el pelo en un gran moño y me pinté de forma muy
casual.
Salí de mi habitación y me quedé muy sorprendida al ver que
mi madre ya se había levantado…
-¿Mamá? ¿Qué haces levantada tan temprano?
-Hoy quiero ir a buscar trabajo…
-¿Para qué? Si con el dinero que gana papá nos sobra…
-Ya… pero me aburro mucho en casa. Necesito distraerme…
-Todo muy ok… y ¿en
qué vas a trabajar?
-Ni idea…
-Muy bien, así me gusta… que tengas las ideas claras desde
el principio.-Dije soltando una risilla que provocó que mi madre me tirara una
bayeta en la cara.
-¿Puedo tomar mi desayuno sin que objetos voladores
intercedan por el aire…?
-Vale… me voy a poner a escribir mi currículum-Dijo mi madre
mientras se sentaba enfrente de mí.
Me tomé un par de tostadas y un vaso de leche mientras ella
seguía escribiendo en aquel papel.
-Mamá yo ya me voy… -Dije cogiendo mi mochila.
-Adiós, cariño-Dijo mi madre al despedirme de ella.
Llegué al instituto muy puntual… Nere ya se encontraba allí.
-¡Tu, tu!
-Yo, yo…
-Ya me puedes ir contando todo…¿qué pasó con Harry?
-¿Con Harry? Nada…
-¿Qué? ¿No os habéis besado, ni nada?
-¡No! Somos amigos… Nada más.
-Dios… con ese hombre no se puede ser una amiga y nada
más…Miriam.
-Yo pensaba antes lo mismo… -Dije riendo.
-Buaf, como para no pensarlo…Anda vamos entrando no vaya a
ser que llegues otra vez tarde y te mate el ogro.
-¿El ogro?-Pregunté riendo sin parar.
-Si… ¿has visto su cara? Y vaya genio que tiene….
-¡Hey , esperad!-Gritaron dos voces atrás de nosotras.
Eran dos chicas, una era morena y de ojos color miel… La
segunda llevaba el pelo rubio con las puntas de diferentes colores y unos
profundos ojos azules.
-Perdonad, pero… ¿estáis en la clase 406?-Dijo la primera.
-Sí…-Contestamos aturdidas Nere y yo.
-¡Genial! Mi prima y yo andábamos algo perdidas ya que ayer
no pudimos venir. Soy Cheryl.-Dijo esta vez la segunda chica.
-¡Y yo soy Angy!-Contestó alegre la chica morena.
-¡Encantada! Soy Nerea y esta es Miriam… pero basta de
presentaciones, el timbre sonó hace 5 minutos…
-¡Vamos corre!-Grité y todas salimos a correr hacia nuestra
clase.
Llegamos justo a tiempo… casi dejamos caer al profesor.
-¡Buenos días ogr…!-Nere me dio un codazo-Digo… profesor.
-Escuchadme todos…-Decía éste mientras nos sentábamos en la
silla.
Todo el mundo enmudeció y el profesor prosiguió.
-Hoy haréis grupos de seis personas… vamos a realizar un
pequeño ejercicio con los microscopios. Las muestras son células de raíz de
cebolla así que separarlas y etiquetarlas por fases de mitosis y el lunes
quiero que me entreguéis un trabajo de lo que habéis realizado. ¿Entendido?
-Sí… -Dijimos todos.
Mi grupo lo formaban: Nere, Angy, Dylan, Cheryl, Jack y yo.
-A la mierda el fin de semana-Dijo Dylan mosqueado.
-Joder… yo que quería salir de fiesta-Dijo Cheryl.
Toda la clase nos anduvimos quejando… al fin llegó la hora
de recreo.
Al llegar a la cafetería Jack nos hizo señas para que nos
sentáramos en la mesa que había conseguido.
Una chica rubia, de astuta y penetrante mirada pasó por
delante de nosotros con una expresión de asco en su rostro… iba acompañada por
dos chicas más.
-Ya estamos todos…-Dijo de manera irónica Nere.
-¿Quién es?- Pregunté a los chicos.
-Es Emily…con sus dos perritos farderos.
Comencé a reírme ante la respuesta.
-Qué buena está…-Dijo Jack.
-Todo lo que tiene de guapa lo tiene de…
-Shh…-Dijo Dylan riendo.
-Ah…¿ ésa no estaba saliendo con Harry Styles?-Preguntó
Cheryl.
Si me quedé sorprendida con la pregunta… más me quedé con la
respuesta.
-Sí… y con Niall Horan-Respondió Nere.
Me atraganté con la comida y empecé a toser.
-¿Ésa ha estado saliendo con los dos?- Pregunté sorprendida.
-Tal y como lo oyes… ¿Harry no te lo contó?
-Espera… ¿Conoces a Harry? ¡Dios!-Dijo sorprendida Angy.
-No… no me ha dicho nada de eso, bueno en realidad… no tiene
por qué decirme nada.
-Pues… estuvo saliendo con Niall… y después con Harry. Los
dos estaban muy enamorados de ella… tanto que incluso llegaron a pelear. Suerte
que descubrieron que solo quería hacerse con la fama de ellos…
-Será…¡asquerosa! –Dijimos a la vez Angy y yo.
El timbre sonó y volvimos a entrar en clase. Sólo quedaban
dos horas más y podría salir de aquel apestoso instituto.
Iba caminando con los chicos hacia nuestra clase cuando me
tropecé con Emily y sus dos amiguitas.
-¡Eh! Ve con más cuidado… ¿Sabías que los ojos están para
mirar por dónde vas?
-Sí… lo sé. Pero no tenía ganas de mirar cosas horribles tan
temprano.
-¿Qué has dicho?
-Lo que oyes… ¿o es que estás sorda?-Dije retándola.
-Miriam, vámonos… o llegaremos tarde-Dijo Cheryl.
-Vas a lamentar lo que has dicho…-Dijo Emily.
-¡Dios qué miedo! Ya estoy temblando…
Mis amigos tiraron de mí y me metieron en la clase.
-Miriam, ha estado genial lo que le has dicho, pero… no te
conviene meterte en broncas tan pronto.-Confesó Nere.
-Estoy totalmente de acuerdo contigo…-Contestó Jack.
-Pues yo no estoy de acuerdo… Creo que Miriam ha hecho lo
que tenía que hacer… Mi enhorabuena señorita-Dijo Dylan abrazándome.
-¿Veis? Dylan está de acuerdo conmigo… Ya es hora que alguien
le plante cara a Emily.
-Creo que ya sé por qué le hablaste así…-Dijo Nere riendo
junto con Angy.
-¿Por qué?
-Porque te ha molestado que haya jugado con los sentimientos
de Harry y con los de Niall ¿a que sí?-Preguntó con una sonrisa picarona.
-Sí… puede que también eso haya influido.
La clase pasó lenta y a la salida Dylan me llamó.
-¡Miriam, espera!
-¿Sí?
-No hemos quedado para lo del trabajo.
-Es verdad… ¿quedamos hoy?
-Imposible… tengo una fiesta con mis amigos. Además no me
pienso pasar un viernes haciendo un trabajo.
-Pues… ¿mañana?
-Eso sí… ¡Mañana por la tarde estoy en tu casa!-Dijo éste
mientras salía corriendo.
-¡Avisa a los demás!-Le grité.
-¡Que sí!-Dijo pero ya no se le veía.
Llegué a casa y no me gustó nada lo que vi.
Había un montón de niños pequeños... entre ellos dos estaban
pegándose en el sofá.
-¡¡Mamá!!-La llamé mientras cogía al niño que estaba pegando
al otro.
-Otra vez… ¡Josh te he dicho mil veces que no pegues a
Arthur!-Dijo mi madre regañando al enano.
-¿Mamá? ¿Qué hacen todos estos niños aquí? Quiero una
explicación ¡ya!-Dije mientras un niño comenzaba a pegarme en la pierna.
-Ya te dije que iba a trabajar…
-¿QUÉ? ¿Estás trabajando de niñera? No, no… dime que estos
niños son obra de mi imaginación y qué en realidad no existen…
-Miriam, cariño es el primer día… son un poco traviesos pero
ya verás que en un par de semanas cambian de comportamiento…
-Espera… ¿un par de semanas? Yo no voy a estar aguantando
niños todos los días… De hecho no llevo ni un minuto y al crío que me está
pegando… ¡me están entrando ganas de tirarlo por el balcón!
-Miriam… no te preocupes. Yo me encargo de todo.
-Mejor me subo a mi cuarto para evitar catástrofes…
Y así hice, me pasé toda la tarde twitteando y leyendo. La
puerta de mi cuarto se abrió.
-Miriam, me ha surgido un pequeño contratiempo… Me he
quedado sin pañales. Quédate con los niños un momento…
-¿Qué? No, no… ni pensarlo. Me dijiste que te encargarías de
todo.
-Sí… pero tengo que ir al supermercado un momento y no
pretenderás que me llevé a 50 niños conmigo ¿no?
-¿Por qué, no? Llévatelos a todos en un saco… he oído que
los niños aguantan bien la respiración.
-Miriam… por favor. Mira sus padres están por llegar, si
llegan que recojan al niño y ya ¿vale?-Dijo mi madre mientras se alejaba del
cuarto.
-Mamá, espera… no puedes dejarme a cargo de esto-Dije
mientras me arrodillaba pidiéndole que recapacitara.
-Miriam, que es solo un momento. No seas payasa y levántate del
suelo.
-Como me hagan algo… te quedará en la conciencia que morí
por tu culpa.
-Vale, vale-Dijo ésta cerrando la puerta.
Me volví hacia los críos, me miraban de una forma muy rara.
Creo que me tenían miedo…
-Mientras que yo esté a vuestro cargo no quiero peleas… ni
pintadas en los sofás ni tampoco saltos. ¿Entendido?
Los niños enmudecieron.
-Genial, al final tampoco son tan malos…-Dije para mí misma
cuando… todos salieron a correr detrás de mí.
No sé las vueltas que di por la casa con los niños atrás de
mí… Sólo sé que cuando llamaron al timbre y vi quien era… Estaba salvada.
Estos son los personajes para que le vayáis poniendo cara.
Emily:
Nere:
Dylan:
Jack:
Angy:
Siguiente ya ^^
ResponderEliminar