Cap 27.

-Estás majara... ¿cinco sonrisas?

-Sí... una cuando te ríes, otra cuando no sabes que decir, otra cuando estás nerviosa, otra cuando haces alguna mueca y la última y la que más me gusta es la que tienes al estar conmigo.

Yo me quedé sin decir nada... nadie nunca me había dicho algo así.

Harry se acercó mucho a mí...

-¡Toma un trozo!-Dije incorporándole un trozo de pizza en su boca y así evitando que pasara algo entre nosotros.

Comencé a reírme pues la cara que puso Harry en ese momento no era para menos.

-Casi me metes la pizza en un ojo...

-No es para tanto... encima que lo hago para que no se te enfríe.

-Prefiero hacer otra cosa antes que comer pizza...

Harry volvió a acercarse a mí... yo no sabía que hacer.

¿Qué me pasaba? Por un lado quería apartarme pero por otro... deseaba darle un beso.

Había soñado tanto ese momento... pero era mi amigo ¿no? No podía besar a Harry.

Ya estaba muy cerca cuando mi móvil sonó.

Yo me incorporé y saqué éste del bolsillo.

-Es un mensaje...

-Muy oportuno...-Dijo Harry.

-Cheryl está loca...-Afirmé con una gran risa.

-¿Qué? ¿Puedo leerlo?

-Claro, mira-Dije enseñándole el SMS.

´´Que sepas que me acuerdo de ti, morena mía´´

-Se ve que te quieren mucho...

-No más que yo a ellas. Cuando pisé Londres nunca me imaginé que iba a encontrar amigas así.

-Creo tu destino siempre ha estado aquí... con nosotros.

-Sí... puedes que tengas razón.

-¿Quieres hacerte fotos conmigo?

-¿Fotos?

-Sí... pero disfrazados.

-En ese caso tu ya estas preparado...

Harry molesto por mi comentario cogió una manta del sofá y me la tiró a la cara.

-Que graciosa eres...

-Te adoro, enserio.

Harry salió corriendo y al cabo de un rato salió vestido de payaso.

Al verlo casi me caigo del sofá.

-No te rías... ponte esta nariz.

Yo me solté el pelo pues también traía una peluca de colores...

Nos pasamos toda la noche haciéndonos fotos y vídeos. Jamás me había reído tanto.

 Harry cogió su móvil y subió esta foto a twitter:

´´Vaya payasa tengo en casa...``

-Creo que es hora de ver la peli, ¿no?

-¡Sí!

-Puse una película que los chicos tenían en un estante... no podía ser más mala.

Harry y yo nos acurrucamos en un sofá. Al poco rato me volví para verle... se había quedado dormido.

Me levanté del asiento sin hacer mucho ruido, apagué la tele y las velas... con mucho cuidado tapé a Harry con la manta que antes me había tirado y deposité un dulce beso en su mejilla.

Subí a acostarme y justo antes de hacerlo me llegó un nuevo SMS.

´´Mañana te paso a buscar a tu casa, me debes una respuesta´´-Dylan.

Yo le respondí con otro SMS.

´´Estoy viviendo en casa de los chicos´´

Mi móvil sonó de nuevo.

´´En ese caso, mañana por la mañana estoy ahí´´

Apagué el móvil... quizás mañana cometería el error más grande de mi vida pero tenía que intentarlo al menos.

(Narra Niall)

En toda la cena con Ketza no me pude sacar de la cabeza a Miriam... se había quedado sola con Harry.

Lo conocía bastante bien y sabía que aprovecharía cualquier momento para... No, no. No quería pensar en eso.

Sólo tenía que centrarme en mí y en mi novia que era Ketza.

Pasamos toda la noche riendo... hasta que llegó el momento de volver a casa. Cosa que aunque me jodiera tenía ganas de hacer.

-Ketza... me tengo que ir.

-¿Cómo? ¿No te quedas a dormir conmigo?

-No puedo... mañana tengo que levantarme temprano para una entrevista.

-Yo quería que pasáramos la noche juntos...

-Lo siento, cielo-Dije mientras me levantaba.

Ella se levantó también y me besó apasionadamente.

-Que sueñes conmigo-Me dijo como despedida.

Llegué a casa un poco tarde,me sorprendió ver que los chicos todavía no habían llegado...siempre dejaban un papelito en el felpudo con alguna frase tonta para el último que llegara a casa.

Yo escribí:

´´¡Sois unos guarros! A saber lo que estáis haciendo con vuestras novias... -.-´ ´´

Comencé a reírme sólo.

Al entrar vi a Harry...¿Que hacía durmiendo en el sofá?

Había velas en el suelo... se me revolvió el estómago al pensar que él y Miriam hubieran tenido una velada romántica.

No le desperté ya que era muy tarde...subí a mi habitación pero antes de entrar vi como salía una luz del cuarto de Miriam. ¿Estaría despierta?

Tenía que comprobarlo.

Llamé a la puerta pero no obtuve respuesta por lo que abrí la puerta de su habitación.

Ella estaba acostada... se había dormido con la luz encendida.

-Mira que lista... como tu no pagas la luz-Dije en voz baja.

Me acerqué a su cama, me entraron ganas de besarla, de acurrucarla...

-Niall, estás muy mal-Pensé con una risilla.

Bueno, nadie se enteraría de nada... era una oportunidad única y quizás fuera el último beso.

Me acerqué a su cara, me incliné sobre su boca y le di un beso.

(Narra Miriam)

Estaba dormida... y de pronto sentí algo.

Abrí los ojos y me encontré con los de Niall.

-¿Qué haces?-Le grité al darme cuenta que estaba en mi cuarto.

-Yo venía para ver si... si los chicos estaban aquí.

-¿Y para eso me tienes que besar? Tú estás majareta, tío.

-¿Yo besarte? ¿A ti? Ni en sueños...

-Mira chaval, no me veas la cara de tonta. Yo he notado...

-Miriam, no tengo culpa que estés obsesionada conmigo y eso te haga soñar guarradas... que crees hasta reales. A saber lo que has soñado...

-¡Pero serás cínico! ¡Fuera de mi cuarto!-Dije levantándome de la cama y olvidando por completo la ropa que llevaba.

Niall me miró de arriba abajo.

-¡Que te vayas, ya!-Le grité mientras le lanzaba un cojín.

Niall cerró la puerta pero podía oír su risa... risa que me contagió.

-Es un completo idiota-Pensé mientras me llevaba dos dedos a mis labios pues sabía perfectamente por mucho que éste lo negara que me había besado.

-Mi idiota...

Me tumbé de nuevo en la cama... no pude borrar en toda la noche el momento en que abrí los ojos y vi su rostro sobre mí.

Cerré los ojos con fuerza ya que eran más de las cinco de la mañana y yo aún seguía despierta... no sé como pero conseguí quedarme dormida.

Aunque en mis sueños seguía Niall... el chico rubio de ojos azules que tanto amaba y que por mucho que lo intentase... jamás podría olvidar.